17 de marzo de 2012

William Shakespeare

Stratford-upon-Avon, 1564 – 1616



Tal vez sea William Shakespeare el autor más leído, citado, traducido, adaptado y representado de todos los tiempos. Su obra, reflexiones en torno al poder, la ambición, el dolor, la culpa o el amor, renueva la lengua inglesa y forja un modelo literario de influencia universal. Nacido durante el reinado de Isabel I en una familia católica, su vida transcurre en paralelo al nacimiento de la Inglaterra moderna. Durante su formación se familiariza con autores latinos como Ovidio y Virgilio. A los dieciocho años contrae matrimonio con Anne Hathaway, con quien concebirá tres hijos. En 1592 se instala en Londres, donde trabaja como dramaturgo y actor para la compañía Lord Chamberlain’s Men, que gana popularidad en esos años. Su éxito como autor literario se agiganta con la coronación del rey Jacobo I, a quien dedica Macbeth hacia 1606. La gloria cosechada en vida le permite retirarse en 1611 a su pueblo natal, si bien la compra de una propiedad en Londres en 1613 indica su intención de no abandonar completamente la dramaturgia. La muerte le recibe en 1616. Sus obras teatrales serán publicadas siete años después de su fallecimiento, en un volumen (el First Folio) titulado Mr. William Shakespeare's Comedies, Histories and Tragedies. Se estima que se imprimieron mil ejemplares de esta edición, de la que solo quedan poco más de doscientos. Aunque la autoría de las obras del Bardo de Avon está hoy plenamente documentada, mucho se ha escrito y especulado acerca de la verdad de su pluma. Su epitafio, común en los enterramientos de la época, parece cobrar en él su pleno significado: «Maldito aquel que remueva mis huesos».